Conoce en qué consiste la cirugía de los párpados

shutterstock_607680785(FILEminimizer)

Hace poco en uno de los ascensores que me llevan a mi planta de trabajo, escuché como dos mujeres hablaban de los posibles retoques que se harían en la cara. Ambas se comparaban con las famosas de la televisión, es decir, una quería la nariz a lo Claudia Schiffler, y otra quería tener una sonrisa como la de Angelina Jolie.

Esto me resulta realmente decepcionante en el sentido de cómo se ha utilizado la cirugía plástica, ya que en lugar de utilizarla para diferenciarnos unos de otros la utilizamos para parecernos a los demás. De hecho, la cirugía estética tiene como uno de sus fines principales corregir los defectos corporales que tenemos.

De esta manera, la cirugía estética serviría para reconstruir partes del cuerpo que se han deteriorado por accidentes o enfermedades. También para corregir defectos de nacimiento que impiden realizar una vida normal, lo que supone una mejora en la vida de las personas en el día a día.

Acudir a la cirugía estética no es siempre una decisión fácil, ya que existen muchos prejuicios sociales que nos impiden acudir a la misma. También está el miedo a que nos dejen mal, ya que si la operación supone pasar por quirófano, ésta siempre tiene el riesgo de que algo salga mal, ya que en toda operación existen riesgos.

Un tipo de cirugía que está de moda es la cirugía de los párpados, este tipo de cirugía se utiliza para eliminar el paso de los años de los párpados, y también para corregir los párpados caídos y otras situaciones que se puedan dar. Hoy te damos los detalles concretos sobre este tipo de operación estética.

La cirugía de los párpados al detalle

La cirugía de los párpados, técnicamente conocida como blefaroplastia, es un procedimiento para extraer la grasa y el exceso de piel y músculo de los párpados superiores e inferiores. La blefaroplastia puede corregir la caída de los párpados superiores y las bolsas de los inferiores, características que hacen que parezcamos mayores y más cansados de lo que somos y que, en algunos casos, pueden interferir con la visión. Sin embargo, la blefaroplastia no elimina las «patas de gallo» u otras arrugas ni la caída de las cejas. Puede realizarse de manera aislada o junto a otras cirugías estéticas de la cara, como el lifting cervicofacial o el lifting frontal.

Si estás considerando la posibilidad de someterse a una blefaroplastia, obtendrá información básica acerca de la cirugía, cuándo está indicada, cómo se realiza y qué resultados se pueden esperar. Sin embargo, es imposible que todas sus preguntas queden contestadas, puesto que en gran parte dependen de factores personales y de las preferencias del cirujano plástico.

Si no se entiende algo, consulte a cirujanos plásticos profesionales, como Estética Ocular, dirigida por la Doctora Cecilia Rodríguez, una médica oftalmóloga, especialista en cirugía de párpados, órbita y vías lagrimales. Esta doctora es famosa por recibir complejos casos derivados de otros especialistas.

Los candidatos ideales para someterse a una blefaroplastia son aquellas personas que buscan una mejoría, y no una perfección absoluta, en su apariencia. Si usted posee un estado general de salud bueno, tiene una estabilidad psicológica, y es realista en sus expectativas, será un buen candidato. Generalmente los pacientes tienen 35 años ó más, pero en algunos casos con tendencia familiar a tener bolsas, los pacientes son más jóvenes. La blefaroplastia mejorará su apariencia y la confianza en uno mismo, pero no conseguirá que nos parezcamos a otra persona o que nos traten de manera diferente. Antes de decidir si se va a realizar una blefaroplastia piense qué quiere conseguir y discútalo con su cirujano plástico.

Existen algunas condiciones médicas que pueden hacer que existan más riegos al realizarse una blefaroplastia, como son los problemas de tiroides, la falta de lágrimas suficientes, la presión arterial alta, las enfermedades cardiovasculares y la diabetes. El glaucoma y el desprendimiento de retina también pueden suponer un riesgo; en determinados casos, puede ser necesaria una revisión oftalmológica previa a la blefaroplastia.

La blefaroplastia se realiza en el quirófano, dentro de una clínica u hospital. Normalmente, no es necesario permanecer en la clínica más que unas horas tras la cirugía. Suele realizarse bajo anestesia local más sedación, o menos frecuentemente, bajo anestesia general, dependiendo de las preferencias de su cirujano. Si se realiza con anestesia local más sedación, el paciente se siente relajado y los párpados están insensibles al dolor; con anestesia general el paciente está dormido durante la operación.

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest