Cuando un deportista o un espectador llega a un evento deportivo, no se hace a la idea de la magnitud que ha supuesto organizar tal evento. Y es que hay muchos detalles que no están al alcance de un ojo no experto, pero que desde luego se echan mucho de menos si en algún momento no aparecen en la imagen. Sin embargo, aunque un evento deportivo está destinado para el competidor y el espectador, la realidad es que no se organiza por y para ellos…
Nos referimos a todos esos sponsors que pagan la carrera, a las empresas que quieren que su nombre aparezca y sea reconocible, a las televisiones que lo retransmiten que también tienen sus propias exigencias y a los encargados de atraer beneficios de cara a futuras carreras, de manera que se tengan que dejar la piel en cada evento. Así que hay que tener en cuenta todos los detalles que formarán parte de la carrera y que aparecerán en forma de mensaje subconsciente, pero en los que sin duda se fijarán los que han ayudado económicamente a que se pueda realizar la competición.
Hay muchísimos recursos que se pueden utilizar, aunque es importante conocerlos todos bien para evitar caer en la tentación de comprar sin tener en cuenta el presupuesto y luego no poder cumplir los requisitos, como nos recuerdan desde Fabrica Banderas. El primer detalle que hay que tener en cuenta es el de la cartelería, ya que servirá como reclamo para atraer a los deportistas y, sobre todo, como medida de información para todos aquellos ciudadanos que quieran acercarse a presenciar un evento deportivo único y a aquellos que quieran animar a los deportistas.
En la línea de salida y en la de llegada, además, será muy importante que haya Fly Banners a cada lado, ya que muy probablemente sea la zona más llamativa, donde se realice el mayor número de fotografías y donde haya más gente ubicada para ver la carrera, de manera que la publicidad calará más. Los Fly Banners, para quienes no lo sepan, son un formato de comunicación y publicidad que consiste en un mástil flexible que da sujeción a una bandera textil impresa, sustentado en un soporte o base que lo afianza sobre una superficie. Los hay de tres formas, en función del estilo que se le quiera dar: en forma de lágrima, en forma de vela o en forma de tabla de surf.
Y si la línea de salida es importante, no lo son menos las vallas que recorren el circuito y que comienzan precisamente tras la línea de salida. En estas vallas pueden instalarse pancartas con el nombre de la empresa anunciadora y organizadora ya que, como en el caso de los Fly Banners, estas serán fácilmente reconocibles y aparecerán mucho en las pantallas y en las fotografías. Además, en este sentido, pueden colocarse banners pop up a lo largo del recorrido que cumplen la función de las pancartas, pero en este caso son más pequeños, tienen un soporte para colocarlos en el suelo en lugar de anclarlos a una valla y son lo suficientemente resistentes como para mantenerse en pie por sí mismos. Si se cuenta con el presupuesto suficiente, se pueden intercalar estos banners pop up por los banners roll-up, que cumplen la misma función que estos, pero en lugar de ser bajos y estar fijados en el suelo, pueden llegar a levantar un par de metros y tienen un pie.
Al acabar la carrera, también es importante contar con las banderas de los países originarios de todos los participantes para poder configurar el podio de acuerdo con la nacionalidad de cada ganador. En este sentido, es importante que las banderas sean livianas para permitir que la bandera ondee con suavidad, sus materiales tienen que ser de alta calidad para que sean resistentes y de esta manera se evite la compra de banderas cada año y además los colores tienen que ser nítidos y vivos para evitar que un determinado color parezca otro y lleve a malentendidos.
La oportunidad económica de organizar un evento deportivo
Hablábamos de la importancia que puede llegar a tener la organización de un evento, ya que se traduce en cifras económicas: el evento tendrá beneficios o pérdidas en función de si hemos cuidado los detalles y la organización ha sido exitosa. Un ejemplo lo encontramos en el Rally de Ourense, que según un estudio organizado por la Universidad de Vigo es a prueba genera un impacto económico tangible directo de un millón de euros a la ciudad.